Vampiros

Miles son los mitos sobre el origen de las especies, desgraciadamente no todo resulta siempre como nos gustaría y si bien es verdad que la naturaleza de las razas nos impulsa a buscar una explicación llena de dramatismo en una historia plagada de intrigas mucho me temo que la gran mayoría de las veces esto no sea más que un mero fruto de la imaginación de aquellos hambrientos de historia pues la explicación más simple es a menudo la correcta.

Es verdad, se ha dicho que  la explicación más simple es la correcta y no se mentía pero para conocer el origen de los vampiros debemos retroceder en el tiempo cuando Dios y el Diablo todavía vagaban por este plano siendo el mundo todavía joven y tierno cuyas entrañas no habían sido mancilladas por las frías garras de la corrupción, el odio, la venganza y la traición de manos de una mujer pues ellas son las únicas que tienen el don de la creación y en sus manos está la continuación de las especies.

Todos conocemos la historia de Adán y Eva, claro que la Iglesia se ha encargado de omitir los detalles más interesantes distorsionando la realidad así que si bien es probable que conozcáis algunos nombres y personajes de esta historia es posible que la historia que aquí se cuenta no sea tal y como vosotros hayáis escuchado y aprendido pues no es la historia de Adán y Eva la que aquí nos ocupa sino la de Lilith, la primera mujer de Adán a quien este abandonó tras la negativa de Lilith a tomar un papel sumiso en la consumación desdeñándola como un juguete roto.

Lilith… cuál ardua fue la tarea de la Iglesia para borrar casi por completo su existencia de la historia dejándola como un mero demonio en los pocos relatos en los que su nombre todavía aparece, cuantas mentiras se han contado de la madre de los vampiros pues en lo único que han acertado esos cuentos de viejas en precisamente en eso, en ser la madre de los vampiros… aunque ella en modo alguno lo sea.

Desdeñada por el único otro ser de su misma especie el corazón de Lilith fue engullido por la oscuridad y los celos hacia la nueva mujer de Adán juró que nunca dejaría que los hijos de Eva  vivieran tranquilos, por favor, no penséis que odiaba a Eva pues no había comparación entre ellas dos pero el odio hacia Adán era más de lo que podía soportar arrojándola a los brazos de Asmodeo en cuyo lecho encontró consuelo corrompiendo su corazón para dar a luz una nueva raza en la forma de unos mellizos, un niño y una niña que darían continuidad a la nueva especie que poblaba la tierra haciéndole brotar lágrimas de sangre

No se recuerdan sus nombres pues, realmente, estos carecen de importancia y sus cadáveres hace mucho que se convirtieron en polvo y recuerdos lo único importante es que aquellos dos mellizos, los hijos de Lilith y Asmodeo crecieron y yacieron juntos desencadenando su propia descendencia propagando la sangre de los vampiros por el mundo. Por favor, no seáis ingenuos ¿Tanto os escandaliza saber del incesto de los dos hermanos? Supongo que preferiríais que los vampiros germinaran en el mundo como una enfermedad, un virus que parasita a los humanos pero desgraciadamente la raza de los hijos de Eva en nada influye a la de los hijos de Asmodeo y esa unión de hermanos era necesaria para mantener la pureza de la raza.

Quizás debería rectificar hasta cierto punto pues si que es verdad que algunos vampiros poseen la capacidad de convertir a los humanos en seres de la noche, después de todo siempre queda algo de verdad en los viejos cuentos y es la sangre de los hijos de Eva la única que puede saciar la sed de aquellos que poseen el corazón de un demonio, como suele decirse lo demás es cosa hecha.